viernes, 17 de septiembre de 2010

TIRED. CHAPTER IX. VACACIONES.

El fin de las vacaciones no es triste... Es el principio de otras mejores.

Las chicas seguían preocupadas por las últimas noticias recibidas.
Pero no podían hacer nada, así que, después de un día de sol y playa bastante tranquilo, cenaron y se arreglaron para irse a pasar la noche al pequeño New York: Benidorm.

A las 11 cogieron el tranvía en la puerta de casa de Aleyt, cargadas con botellas de Sandevid.
El viaje fue pesado, ruidoso y lento, pero subió al tren tan peculiaridad de personal que no tuvieron tiempo para aburrirse.
- ¡¡Oye!! ¡¿Puedes hacernos una foto?!
Aleyt se quedó pensativa, pero rápidamente respondió que sí.
- Vale. A ver...
Enfocó y ¡bingo!
- ¡Gracias! ¿De dónde eres?- Le preguntó uno de los chicos del grupo que le habían pedido el favor.
- De... ¡Alicante!
Silvia se quedó mirándola.
- ¡Ah! ¡Nosotros de Barcelona! - Respondieron gritando.
- ¿Y a mí qué me importa?- Dijo Ana en voz bajita.
Todas se echaron a reír.

Al llegar a Benidorm una masa de gente caminaba despacio hasta llegar a la playa de Levante, donde las chicas pensaban hacer botellón y luego salir por las discotecas del paseo.
Al llegar, se les acercó un chico argentino... Una cosa llevó a la otra y acabaron gastándose 20€ para entrar en las 3 discotecas más grandes de Benidorm cuando las del paseo cerrasen.
- Joder es que con ese acento...
- Ya te digo, pero nada más llegar nos ha sacado 100€ ... Eso sí que es negocio jajaja.
- Bueno chicas, como veis la playa está lleeeena de policías. Vamos a tener que buscar otro sitio para beber.- Propuso Ana.
Y así lo hicieron. Encontraron un pequeño recodo a un lado de la acera y allí sacaron sus botellas y bebieron.
De repente, se les acercó un chico joven de acento madrileño...
- Hola chicas. Os compro si os sobra alguna botella. Es que ha venido la policía y nos ha quitado todas las que llevábamos enteritas.
- Uff... Lo sentimos pero es que llevamos una para cada una.
- Vale, vale. Gracias.
El chico se alejó con otro amigo.
- Jope me dan pena. ¿Le damos un vasito de tinto?- Dijo Carol con ojitos de cordero degollado.
- Vale. ¡Eh!
El chico se giró.
- Ven un momento. - Dijo Carol.- Anda toma llénate el vaso con esto.
- ¡Qué chicas más majas! Vosotras sí que sabéis... Con el tinto te agarras una cogorza...
- Bueno es lo más barato...
Al momento, aparecieron el resto de amigos del muchacho con más botellas de alcohol.
Pero en todos los grupos hay un torpe y ese personaje al dejar las botellas de vodka recién compradas en el suelo... Las rompió.
- ¡Me cago en tus muertos!- Dijo uno de ellos.- ¡¿Pero estás tonto o qué?! ¡Llevo gastados 80€ en un puto día!
Las chicas no podían parar de reírse. Todas excepto una: Carol. Sí, había cambiado sus ojitos de cordero degollado por los de perdiz cachonda... Miraba a aquel hombretón moreno, cani, con camiseta de tirantes blanca, esclavas de oros y vaqueros ajustados...
Se acercaron al grupo de los chicos y estuvieron buen rato hablando con ellos. Después se hicieron una foto y Aleyt vio algo extraño...
- ¡Pst! ¡Sara!
- ¿Qué?
- Por favor dime que la Cazurra no va cogida de la mano con el cani ese...
- ¡Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja!
- ¡Vamos no me jodas!- Dijo Silvia.
- ¿Qué?
- ¿Habéis visto a la Cazurra y al cani?
- ¡Síiiiiii! Jajajajajajaajajaja.
Después de las fotos, las chicas se fueron para las discotecas de la playa dejando atrás a los chicos. A Carol le dio mucha pena dejarlo allí...
- ¡Carol! ¡Me has defraudado!
- ¿Por?
- ¡Cogida de la mano con el cani!- Gritó Aleyt.
- Jajajajaja, ¡que me cogió él!
- Sí, sí, ¡excusas!- Dijo Ana.
- Joooo...
- Por cierto Carol... ¿Con Xoel ya nada?
- No lo sé Aleyt. Ya te contaré.
- Ah vale vale.
Entraron a KM, pero el ambiente era penoso, horripilante... Así que, aunque les fastidiase darle la razón a Aleyt, fueron al mejor pub de Benidorm... El pub heavy de la playa.
Allí por lo menos estuvieron tranquilas tomando una copa, viendo a un chico tocar la guitarra eléctrica en directo y conocer a alocados daneses, ingleses, irlandeses, polacos, etc., ¡ah! y a una pandilla de Ávila.

Salieron de allí para ver qué se cocía en la Penélope, pero más de lo mismo. Además, cuando entraron ya estaba decayendo y cerró a los 5 minutos.
Al salir, una cara familiar se les acercó. Era el cani.
- ¡Hostia...! Qué grande es el cani este.- Dijo Silvia desde lo más profundo de su alma.*
- ¿Dónde vais chicas?
- Pues a las discotecas de arriba.
- Ah... Nosotros nos vamos donde van los guiris... Madre mía ahí sí que hay ambientazo.
Y se despidieron.
Caminaron por el paseo hasta llegar a la Avenida de Europa, acompañadas de dos chicos amigos del cani, para coger un taxi que las llevase a la otra parte de Benidorm.
- Ana... ¿Y Carol?
- ¿Qué?
- Carol... ¡Qué no la veo!
Silvia se acercó rápidamente...
- Emm vale... Ahora sí que estoy flipando... ¿Y Sara?
Bajaron otra vez la calle sigilosamente... Y la imagen fue espeluznante...
Por un lado, Sara y uno de los chicos discutiendo porque ella decía que si se liaba con él no podía estar saludando a más tías... Y la otra... No es apta para menores ni gente con problemas cardiovasculares...

En resumen, terminaron la noche en una enorme discoteca llamada KM y al salir el sol lucía en todo su esplendor.
Tuvieron que correr para poder pillar el tranvía sin problemas.

Las vacaciones de las chicas terminaron al día siguiente, con una visitilla a Terra Mítica.

Fue otro viaje de Élite.

No hay comentarios:

Publicar un comentario